Principios Diarios
ー Escrito por Masami Saionji
１．
Tanto la medicina y la farmacología, como el arte y la ciencia, toda la civilización y la cultura, provienen de la sabiduría divina de Dios. No hay necesidad de detestar todo esto solo porque sea contrario a la naturaleza. Sin embargo, esto tampoco significa que uno deba estar completamente sumergido en ellos. Las personas sabias son aquellas que pueden caminar el camino intermedio entre estos. A veces dependiendo de la medicina y la civilización, y otras veces no necesitándolas. Es crucial navegar a través de las situaciones utilizando la intuición y el juicio apropiados, otorgados por la sabiduría divina de Dios, de acuerdo al lugar y al momento. Los seres humanos no deben vivir de manera rígida e inflexible, inclinándose extremadamente hacia un lado u otro. Vivir siempre de manera flexible es algo a lo que aspirar. Para ello, convertirse en una persona que puede ser sinceramente agradecida por todo es una condición necesaria.
2.
La paz mundial no es algo que pueda ser traído por algún santo o ser divino específicamente destacado.
La paz mundial se establece en proporción directa al mejoramiento del alma de cada persona en la humanidad.
Es a través de cada individuo despertando a la espiritualidad y a través del gran poder de completitud que se logra el camino de paz y armonía.
Por lo tanto, depende de cada uno de nosotros.
También es la responsabilidad de cada uno.
No es cuestión de que alguien más lo haga; eres uno dentro de toda la humanidad que lleva la responsabilidad de lograr esa paz.
Esto no debe ser olvidado.
Nunca debes hacer nada que baje el nivel de toda la humanidad solo por el bien de uno mismo.
3.
El corazón humano no es tan frágil, ni es débil. Cuando el corazón está conectado directamente con el cielo, la sabiduría divina fluye directamente en él, desatando un poder que puede hacer posible incluso lo imposible. Los seres humanos, por naturaleza, deberían ser así. Aquellos cuyos corazones parecen frágiles y débiles simplemente no están conectados directamente con lo divino; la punta de su corazón se ha desviado en algún lugar, causando que no toda la energía de Dios llegue directamente al cuerpo, sino que se libere en el camino. Esto es similar a la diferencia entre insertar una manguera directamente en un grifo y hacerlo de manera desviada. Cuando se inserta de forma desviada, el agua se filtra desde el espacio entre el grifo y la manguera, brotando y fluyendo, por lo que no toda llega al cuerpo, debilitando así el poder del corazón.
4.
Vivamos siempre con esta actitud: aprovechar al máximo cada día, hablando solo palabras de bondad, amor y compasión, y evitando pronunciar cualquier palabra dañina. Si alguien dice algo malo, tengamos la agilidad para cambiar rápidamente el tema.
